viernes, 12 de agosto de 2016

Luis César Ayala Camps

Semblanza a Luis César Ayala Camps

Maestro de Música
Director Musical y Gestor de la Orquesta Puerto Rican Power
Con Motivo Dedicación Festival Santa Cecilia
Centro Cultural Humacao

Con motivo de la celebración de Santa Cecilia reconocida patrona de los músicos y los poetas (en adición de los ciegos), este año se dedica a un músico humacaeño oriundo del barrio Mambiche Blanco de la ciudad de Humacao.  Se trata de Luis César Ayala Camps integrante y fundador de la orquesta Puerto Rican Power y su director musical por más de veinte años, conocido en el ambiente musical como Luisito Ayala.

Nace en el Barrio Chino de Humacao en la calle Rocafort, el 13 de octubre de 1950 hijo de agricultores y trabajadores entre quienes cuyos familiares había músicos autodidactas como su extinto abuelo paterno ciego Braulio Ayala a quién la guitarra alegrara su oscuridad y músicos de cultivo como lo fue su tío materno Venancio Camps quién tocaba trompeta.  Entre la guitarra de don Braulio en una hamaca y la trompeta de su tío Venancio surge el germen musical que perseguirá a través de su vida.
 
Integra una familia de tres hijos con sus dos hermanas, la extinta Lidia Ayala, maestra, y Norma Ayala, hijos del matrimonio integrado por el difunto padre Luis César Ayala Gerena y Lidia Camps su madre amorosa, aquí presente en este acto. Ha constituido un matrimonio durante 36 años con Carmen Iris Morales, junto a quién ha procreado una familia de tres hijos varones: Luisito, Braulio Javier y Ángel en adición a la princesa de la familia su hija Nydia.     

Temprano en su niñez la trompeta de su tío inquieta una vocación musical innata que se inicia bajo la tutela de Víctor (Nito) Duclerc maestro de música de la Banda Musical de Humacao.  Las limitaciones de equipo y recursos de la orquesta sumada a la disciplina recia de don Nito Duclerc le imponen el trombón de vara como instrumento para tocar, en los inicios de su carrera artística a pesar de preferir la trompeta. 

A su lado en la orquesta de Duclerc en el sector de los trombones, se sentaba un amigo a quién se le asignó un trombón de pistones y de ese amigo aprendió como dar las notas con pistones que son similares a los de la trompeta, su anhelo.  Mientras tanto tomaba a préstamo la trompeta de su tío en la casa para el manejo de su embocadura y adquirir así su modelo de sonoridad.  Finalmente su tío termina obsequiándole la trompeta, que llevó cierto día a su clase de música alcanzando a ser escuchado por su maestro Nito Duclerc quien al percatarse de su dominio en el instrumento decide entonces asignarle a tocar trompeta.  Estaba entonces en la Escuela Intermedia Juan Peña Reyes donde comienza sus clases de solfeo porque quería aprender a tocar trompeta.

Con el pasar del tiempo llega a ser discípulo para los años sesenta de Germán Peña que más que maestro de música fuera su maestro de vida hasta su muerte reciente.  Se trata de un hijo de la distinguida familia de educadores y músicos engendrada por don Juan Peña Reyes, cuya familia la integran también el extinto maestro Lito Peña y su hijo de tercera generación el maestro Cucco Peña.  Integra eventualmente la orquesta de maestro Germán Peña conocida como La Antillana.

Su proyecto musical con orquesta Puerto Rican Power ha sido producto del empeño mas decidido cuando decide abandonar su fuente de empleo en la industria farmacéutica y de equipos médicos para aventurarse por completo a su vocación de músico.  Apostó a si mismo.  Ese proyecto musical de más de 35 años tiene 20 producciones exitosas.

Luisito Ayala ha participado con la Orquesta de Willie Rosario, La Orquesta Panamericana del maestro Lito Peña, Willie Meléndez, La Antillana, y Pedro Conga.  Con Pedro Conga se desempeñó como director acompañando figuras reconocidas como Justo Betancourt, Santos Colón.  En dicha orquesta conoce a Tito Rojas quién se desempañaba como corista en ese entonces, y quién eventualmente se integraría a su Orquesta Puerto Rican Power como vocalista para el 1983.

Reorganiza la Puerto Rican Power para el 1975 como proyecto suyo luego de haber sido disuelta por su fundador Jesús (Chuy) Castro, por darle prioridad a sus estudios en medicina y quien le cediera eventualmente los derechos de la orquesta.  Este proyecto musical a contado con el respaldo del compositor y poeta Catalino (Tite) Curet Alonso, quién intercedió con el productor Álvares Guedes, dueño del sello discográfico Gema, ante quién Tite le recomienda la Puerto Rican Power como orquesta meritoria para grabación.   Fue entonces que surge la primera grabación de la Puerto Rican Power en el 1971, titulada Cero Novela, de la autoría del propio Tite Curet Alonso, junto a otros arreglos de Máximo Torres y Jorge Millet. 

En ese mismo año 1975 se realiza su segunda grabación bajo la batuta de don Tite Curet Alonso, con la dirección de Jorge Millet y con composiciones de Tite y de Roberto Angleró.  En ese segundo disco se distingue un número grabado por primera vez por La Orquesta Puerto Rican Power el El Eco de un Tambor de la autoria de Tite Curet, canción que luego la voz de Andy Montañez aportara a su fama, grabándolo en otra producción suya.  

Ha actuado como director musical de artistas de la talla de Cheo Feliciano, Ismael Miranda, Héctor Lavoe, Vitín Avilés, Celia Cruz, Paquito Guzmán, Tito Allen, Tito Rojas, Vicentico Valdés, Frankie Ruiz, Peter Conde Rodríguez, y Santitos Colón entre otros.

Ha visitado con su orquesta ciudades europeas como Amsterdam, Berlín, Frankfurt, Munich, Mannheim, Colonia, Hamburgo, Bruselas, París, Londres, Zurich, Pamplona, Barcelona, Madrid, La Canarias, Milán y Roma.  Ha visitado con su orquesta ciudades como Tokyo, Yokohama, Hiroshima, Osaka, Okinawa, Fukuoka, Nara y Nagoya.  Su orquesta es una de las más afamadas agrupaciones en Toronto, Quebec y Montreal (Canada).

Es reclamado en Méjico, Panamá, Nicaragua, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Perú, Chile, Venezuela, Republica Dominicana entre otros.

Se ha dicho de Luisito Ayala que la formula de su éxito consiste en la “articulación de una propuesta musical matizada por el sonido cadencioso de la salsa tradicional, tomando la receta armónica del pianista Larry Harlow, al combinar dos trompetas y dos trombones con la parte rítmica produciendo un sonido excelso con en combinación con temas festivos y algo pícaros que presentan una buena oferta para el bailador”.

Entre sus éxitos más sonoros se encuentran números como Tu Cariñito, A Donde Irás, Juguete de Nadie.

En esencia se trata del empeño de un humacaeño con vocación de músico que convirtió su empeño en una meta de toda una vida fructífera del lado del arte musical.  Un humacaeño que hace honor a la tradición musical y orquestal de la ciudad de Humacao y quién hace honor a Santa Cecilia reconocida como la santa de los músicos y de los poetas.  Por eso haciendo honor a quién honor merece el Centro Cultural de la Ciudad de Humacao reconoce y rinde homenaje a este distinguido maestro de la música Luis César Ayala Camps.


Redacción:  Rafael Ayala, JD

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