viernes, 5 de junio de 2015

EL MANEJO DEL RECURSO AGUA


EL MANEJO DEL RECURSO AGUA



Dr. Carlos  Pérez Morales
Geógrafo/Historiador
Docente Jubilado
Universidad de Puerto Rico



El agua es un recurso natural renovable, aunque sobre esto existe un debate entre los científicos.  En lo que hay consenso es que el agua subterránea puede considerarse no renovable por un manejo ineficiente.  Podemos mencionar como ejemplo los acuíferos.  Cuando se extrae agua excesiva el mismo puede desaparecer.  También éstos pueden quedar inútiles para el consumo cuando se contaminan o cuando reciben una instrucción salina.

La planificación del manejo sobre el manejo de este recurso es indispensable. Un elemento muy importante a considerar, lo es el crecimiento poblacional en la región. Este crecimiento de la población es un fenómeno que ocurre a nivel mundial.  Es más acelerado en los países pobres de los continentes de Asia, África y América latina. Robert Malthus dijo que mientras los alimentos en la Tierra crecían a nivel matemático la población ha nivel mundial crecía nivel geométrico.  Por lo tanto el consumo del agua aumentaría notablemente.

El agua que tenemos disponible en la Tierra, es la misma desde sus orígenes.  Uno de los factores principales a tomar en consideración es la desigualdad en la distribución en el planeta.  Hay lugares que a penas reciben agua durante el año. Se clasifica como desierto un lugar que reciba menos de 250ml. Durante ese período, el agua que cae en los desiertosm se evapora rápidamente por efectos de la irradiación solar.  Hay desiertos en el mundo, dónde el ser humano ha intervenido y disponen de gran cantidad de agua.  Esta ocurrencia la podemos observar en la ciudad de Las Vegas en el estado de Nevada, Estados Unidos.  Esta ciudad está ubicada en pleno desierto.  La construcción de la represa Hoover en  la frontera estatal con Arizona y por la conectividad a la ciudad, transformó a Las Vegas hasta convertirla en una de las ciudades de mayor consumo de agua a nivel mundial. Allí podemos observar numerosos hoteles, con enormes fuentes de agua que embellecen este lugar.

Con la urbanización acelerada que comenzó en el Siglo XX por motivos de la emigración de los seres humanos, desde las zonas rurales, hacia las urbanas tuvo como consecuencia un gran crecimiento poblacional en las las ciudades. Este crecimiento de las ciudades tuvo como consecuencia un alza en la demanda de agua.  La falta de una buena planificación para el manejo de este recurso tuvo el efecto de provocar escasez en estas áreas.  La falta de agua suficiente para la industrialización, la agricultura, el consumo de la misma por los seres humanos y otros animales, provoca enormes pérdidas económicas.

Un manejo eficiente de este recurso incluye una eficiente estructura para administrar la disposición, potabilización y distribución del agua a los consumidores. Todo esto debe hacerse al menor costo posible.

Debe estudiarse la disponibilidad de aguas superficiales y subterráneas y otros factores para poder hacer proyecciones para el futuro.  Esto debe hacerse a corto y a largo plazo.

Puerto Rico cuenta con muchos datos producidos científicamente sobre la disponibilidad de agua en todo su territorio. Estos han sido producidos por el Servicio Nacional de Meteorología, el Servicio Geológico de los Estados Unidos, el Departamento de Recursos Naturales y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados.

También existen en el país numerosos ríos con suficiente escorrentía, grandes acuíferos y aguas subterráneas.  Además llegan a la isla numerosas ondas y algunos ciclones que pasan cerca o azotan a la isla, dejando a su paso grandes cantidades de agua.

El clima de la isla ha sido estudiado por la cantidad de datos científicos que se dispone. Esto, claro está, incluye las precipitaciones sobre nuestro territorio. Otro de los elementos a considerar para el manejo del recurso agua es la presencia de sequías en algunos años.  Aunque la época más seca en Puerto Rico es desde el mes de diciembre hasta el mes de abril, en ocasiones se producen sequías que duran hasta el mes de agosto.  En estas ocasiones el nivel de los embalses baja significativamente.  Para mitigar esta situación el gobierno establece un racionamiento en las partes afectadas.  Creemos que esta situación se puede evitar con un eficiente manejo.

La disposición de embalses en la isla es de mucho interés para el manejo del agua.  Aunque existen 34 embalses, la sedimentación en la mayoría de ellos es un factor que limita su almacenaje. Es una necesidad imperiosa el darles mantenimiento a estos embalses, incluyendo el dragado, para un eficiente almacenaje de agua.  La construcción de reservorios para almacenaje del agua contribuiría grandemente a disponer de este recurso durante un prolongado período de tiempo. El mantenimiento de las tuberías de distribución del agua es un imperativo.  Hay que evitar y corregir los salideros en las tuberías, así como también el robo de el agua para uso doméstico e industrial.


Otros son los factores a considerar para un eficiente manejo de este recurso.  No podemos permitir, que en Puerto Rico se pierda más del 50% del agua potabilizada.

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